Lo cierto es que he salido unos días. Disculparme si no he contestado a vuestros comentarios de mi anterior post, tan sólo GRACIAS. Me he marchado a mi cercano norte. Es un buen lugar donde lamerse las heridas, donde estar, donde dejarse ser. Pero eso es otra historia, que no viene a cuento.
Estoy en un lugar muy tranquilo cerquita del riu de Sant Nicolau, que surte de frías y claras aguas al Noguera de Tor. Un río con muchos intereses y sin embargo a mi se me antoja que el interés más grande que tiene es el de ser un lugar en el que Dios y el Diablo se juntan de tanto en tanto, para estar tranquilos, para hablar de sus cosas, para pescar truchas y después compartirlas, junto a un buen vino. Supongo que tras despachar sus asuntos y comer las truchas, compartirán copas y cama y luego se Irán cada uno por su lado. Diciendo algo así como aixxx si es que estos mortales no tienen remedio. No sé, espero que al menos las truchas les sienten bien.
La noche, escribo de noche en una preciosa terraza con vistas a las montañas rodeada de abetos y hayas silvestres. La noche como decía, es algo fria y aquí, da la sensación de que el Otoño tiene prisa por venir, con sus setas, sus castañas, boniatos, membrillos, productos del campo y uvas recién cogidas (seguro que el heurigen de este año, allá en un norte algo más lejano es esplendido).
La noche está nublada, y sin embargo las grises nubes dejan huecos en los que Khonsu se deja entrever ya a punto de ser pleno. Un gato pelirrojo a rayas y con ojos verdes parece disfrutar de la noche, o prepararse para cazar ratones. Me mira entornando sus ojos, sin pestañear, como diciendo: “amigo no tienes ni puta idea de la vida”. No creo que tenga razón. No me veo con ánimos de discutirle a un gato. No pasa nada y pasa todo, pasa la vida, y pasa el tiempo. Un murciélago revolotea nervioso y caza en la noche casi sin estrellas. El viento es suave y trae aromas a rododendro y sauce. De esos sauces que no lloran.
Se filtra entre la retama y las perennes hojas de los pinos negros una calmada y suave brisa de tranquilidad, de paz y sosiego del alma. Fragancia de sueños y tiempos que vendrán. Quizás Descartes tuviera razón y para mejorar nuestro conocimiento haya que aprender menos y contemplar más. Y eso hago, contemplar, descansar y no hacer nada. Y esta bien. Incluso estoy escribiendo para nada decir. Quizás tan sólo escribir estas palabras (ya sabéis con tinta azul impregnando pluma de búho enamorado de alondra.)
Bebo un vino cultivado, cosechado, creado y embotellado por un amigo. Sin duda tiene mucho más cariño y amor que calidad… pero a mi se me antoja un buen vino, es compartido con alguien que guarda cosas mías en su interior, entre otras, mi paz en sus rizos. que hoy, será este Otoño, o el viento del norte, se me ocurren de color nueces dulces.
En fin, que hoy, en esta primera noche medio fría, escribo para nada decir, tal vez que crecen las setas…. Y eso es estupendo.
Estoy en un lugar muy tranquilo cerquita del riu de Sant Nicolau, que surte de frías y claras aguas al Noguera de Tor. Un río con muchos intereses y sin embargo a mi se me antoja que el interés más grande que tiene es el de ser un lugar en el que Dios y el Diablo se juntan de tanto en tanto, para estar tranquilos, para hablar de sus cosas, para pescar truchas y después compartirlas, junto a un buen vino. Supongo que tras despachar sus asuntos y comer las truchas, compartirán copas y cama y luego se Irán cada uno por su lado. Diciendo algo así como aixxx si es que estos mortales no tienen remedio. No sé, espero que al menos las truchas les sienten bien.
La noche, escribo de noche en una preciosa terraza con vistas a las montañas rodeada de abetos y hayas silvestres. La noche como decía, es algo fria y aquí, da la sensación de que el Otoño tiene prisa por venir, con sus setas, sus castañas, boniatos, membrillos, productos del campo y uvas recién cogidas (seguro que el heurigen de este año, allá en un norte algo más lejano es esplendido).
La noche está nublada, y sin embargo las grises nubes dejan huecos en los que Khonsu se deja entrever ya a punto de ser pleno. Un gato pelirrojo a rayas y con ojos verdes parece disfrutar de la noche, o prepararse para cazar ratones. Me mira entornando sus ojos, sin pestañear, como diciendo: “amigo no tienes ni puta idea de la vida”. No creo que tenga razón. No me veo con ánimos de discutirle a un gato. No pasa nada y pasa todo, pasa la vida, y pasa el tiempo. Un murciélago revolotea nervioso y caza en la noche casi sin estrellas. El viento es suave y trae aromas a rododendro y sauce. De esos sauces que no lloran.
Se filtra entre la retama y las perennes hojas de los pinos negros una calmada y suave brisa de tranquilidad, de paz y sosiego del alma. Fragancia de sueños y tiempos que vendrán. Quizás Descartes tuviera razón y para mejorar nuestro conocimiento haya que aprender menos y contemplar más. Y eso hago, contemplar, descansar y no hacer nada. Y esta bien. Incluso estoy escribiendo para nada decir. Quizás tan sólo escribir estas palabras (ya sabéis con tinta azul impregnando pluma de búho enamorado de alondra.)
Bebo un vino cultivado, cosechado, creado y embotellado por un amigo. Sin duda tiene mucho más cariño y amor que calidad… pero a mi se me antoja un buen vino, es compartido con alguien que guarda cosas mías en su interior, entre otras, mi paz en sus rizos. que hoy, será este Otoño, o el viento del norte, se me ocurren de color nueces dulces.
En fin, que hoy, en esta primera noche medio fría, escribo para nada decir, tal vez que crecen las setas…. Y eso es estupendo.
Maravilloso lugar en el que te encuentras Carlos.Un espacio idóneo para encontrar la paz interior.
ResponderEliminarBesos
Hola amigo, siempre es bueno concederse un parón mental y disfrutar, y sobre todo en ese sitio tan cálido y silencioso donde te encuentras, excelente escrito y una alegría que te sigas acordando de las amistades blogueras para darnos a conocer tus relatos. Un abrazo desde el sur y a disfrutar.Zíngara.
ResponderEliminarDices mucho mi querido Carlos, dices que estás aquí y eso es más que suficiente.
ResponderEliminarQue la brisa de este estrenado otoño limpien tu alma y lleven quietud a tus dulces ojos, que tanto eché de menos.
Besos mimosos con todo mi corazón.
Pues yo creo que dices mucho y sí, es tiempo de setas y no hay nada para acompañarlas mejor que un vino. Que aproveche y que disfrutes.
ResponderEliminarUn besazo.
preciosa bienvenida al otoño.
ResponderEliminarUna delicia leerte.
ResponderEliminarBesos
En les teues paraules he recordat perquè m'agrada tant la tardor, la filosofia i les nits fresques.
ResponderEliminarDe vegades està bé parlar per a no dir res, el perill està en parlar sinò es té res a dir o per omplir el silenci.
Tu has dit tot, sense dir res...ja saps, la vida passa i el temps també.
Un plaer llegir-te i qui poguera gaudir d'una nit com eixa més a sovint!
Besades.
M.
No hay que hablar a veces, no hay nada que decir, hay que transmitir, hacer sentir... y creo que lo consigues!!
ResponderEliminarMuaki
He imaginado ese lugar, ese gato sabelotodo, esos árboles y a ese hombre que nos hace viajar con sus palabras y nos enseña un trocito de sí mismo mientras degusta un buen vino.
ResponderEliminarCon tu entrada llegó el otoño, la estación de la inspiración.
Besos Carlos.
He visualizado a Dios y al Diablo pescando truchas... Magnifico Carlos!
ResponderEliminarTornen a sortir els bolets i sembla que la vida continua...
Petons
¿Y dices que escribes para nada decir? Querido Carlos, si a ti te brotan las letras cómo brotan las setas en otoño. Dices mucho para no decir nada…
ResponderEliminarUn beso desde mi Jardín.
Hoy sólo quiero acompañarte, como lo hacen los/as grandes amigos/as. Estoy a la vera de la melancolía del paisaje y de tu alma.-Vamos, si tú me lo permites, en silencio, estoy aquí para escucharte-
ResponderEliminar-Un abrazo, amigo-
Pues mira que sin hablar de nada en especial nos has dejado una aureola otoñal, después de la resaca que nos deja el verano.
ResponderEliminarAdemás, has dejado paz... mucha paz...
Un abrazo
Me gustaría poder estar en ese lugar ahora, y llenarme de paz y de armonía. Poder olvidar, aunque solo sea por un ratito y dejar descansar mi alma...
ResponderEliminarBuen finde Carlos
Un beso!
MORGANA. Si es un lugar explendido.
ResponderEliminarCONCHI. desde luego, que sí, se ha disfrutado del lugar. Besos a tu Sur.
MIMOSA. Mis ojos brillan como siempre... un beso.
PRINCESA. Yo propongo unos rovellons de catalunya, a la plancha con ajo y sal gorda. Un chorreoncito de aceite de oliva, por ejemplo de Jaén. Un buen vino de la mancha... Un beso wapa.
CLAUDIA. Si el Otoño, ya está aquí.
MARÍA. Me alegra qeu te gustase.
WELTSCHMERZ. Les nits eren plenes de núvols, algunes plovia suaument, arriba la tardor. arriben somriures ...
BLIND-Y si consigo transmitir, sentir, notar... me alegro y sonrio. Esta sonrisa es para ti.
ROSALIA. Tus comentarios siempre son estupendos. por cierto pasé por tu ciudad.
LUCIERNAGAS.La vida continua, com sempre, sempre ho fa. Déu i el Diable segueixen pescant. Allí el vaig deixar discutint sobre amor, mort i altres històries.
ROSAIDA. Me alaga que pienses que me brotan las palabras de ese modo. Un beso a tu jardín.
BEATRIZ. Claro que te lo permito, claro que si
JOSEP. Esa era la intención dejar algo de paz.
GATA NEGRA. Lo cierto es que es un lugar estupendo y te recvomiendo que vayas en cuanto puedas... un beso
Cuando el lugar, la gastronomía, la compañía... se alían... todo es una balza de aceite... Y se puede disfrutar al 120%
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Gracias por transmitirnos esa paz, ese fresquito que te eriza la piel y ese paisaje que seguro que es digno de miles de palabras!!
ResponderEliminarHermoso, Carlos, disfruta mucho de esas noches con sus días!!
Cuídate, un besazo
Claro! hemos estado viviendo los dos para nosotros mísmos en estos dias de vacaciones en los que hemos coincidido en las fechas y , claro! por eso cuando vi esa puesta de sol que relato en mi blog me acordé de ti. Telepatía? empatía? hilo conductor? cosmos? no se que es pero algo bueno es. Besos.
ResponderEliminar¡Y que más podés pedir! Nada...eso creo yo.
ResponderEliminarNada que pueda acicalarte más de lo que ya estás.
Te beso
Pues para nada decir, has dicho mucho y muy bonito.
ResponderEliminarBesos felinos.
Disfruta de tí, sobretodo, Carlos
ResponderEliminarTe dejo un beso y mis caricias